poesias y amistad

El escritor chileno Pablo Neruda, por todo lo que aún representa para el mundo de las letras, no merece estar en el medio de una disputa entre quien preside la fundación que lleva su nombre y sus herederos, pero los intereses encontrados entre ambas partes así lo han querido.

Según se filtró a la prensa, los familiares del autor nacido en Parral el 12 de julio de 1904 han decidido realizar una presentación judicial contra Juan Agustín Figueroa, el abogado que preside la Fundación Neruda, por considerar que a través de dicha entidad“se ha comercializado y vulgarizado” el nombre del poeta.

De acuerdo a su criterio, la organización “se ha extralimitado en sus funciones” al convertir la identidad del chileno en marca de diversos productos y traicionó el ideario social de Neruda.

En declaraciones efectuadas ante la agencia Télam, recoge Terra, Bernardo Reyes, sobrino nieto de Neruda, explicó que “Figueroa tiene un mandato para firmar contratos relativos a derechos de autor, pero jamás la familia dijo que iba a renunciar a derechos que son inalienables, como ser dueños de la marca que actualmente está registrada a nuestro nombre”.

Este hombre, aseguró Reyes, “ha intentado adueñarse de la marca, como los latifundistas cuando corren los cercos de sus vecinos que disponen de un pequeño terreno aledaño”, y hacer con ella operaciones comerciales que incluyen desde vinos de exportación y agendas hasta chocolates y la explotación de una cadena de hoteles.

La batalla, según parece, recién comienza porque hasta ahora los herederos de Neruda sólo han conseguido que Figueroa no pueda pronunciar discursos a nombre del escritor, pero aún restan numerosos detalles por resolver. Ojalá, pues, ambas partes dejen de lado sus propios intereses y trabajen en conjunto para mantener vivo el espíritu y honrar la memoria del talentoso creador de“Veinte poemas de amor y una canción desesperada”.